El ácido fólico es un nutriente esencial para el cuerpo humano, sin importar su edad, género o condición. Su consumo no es solo para embarazadas, sino para todas las personas que quieren cuidar su salud. El ácido fólico, también conocido como vitamina B9, es recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La falta de este nutriente puede causar anemia, un problema que afecta a 800 millones de personas en el mundo, según los cálculos de la OMS. La anemia se caracteriza por síntomas como mala memoria, dificultad para respirar, pérdida del gusto y el olfato, depresión y sensación de hormigueo en las extremidades.
La prevención es clave para evitar estos problemas, por lo que se debe seguir las recomendaciones sobre el consumo de suplementos de hierro y ácido fólico. Esto también ayudará a mejorar la salud desde la adolescencia hasta la vejez.
BENEFICIOS DEL ÁCIDO FÓLICO PARA LA SALUD
El ácido fólico tiene muchos beneficios para la salud, entre los que se destacan:
- Favorece el desarrollo óptimo en la niñez y la adolescencia: El ácido fólico aporta parte de su estructura al ADN y al ARN, que contienen la información genética de las células y cómo se va a desarrollar el organismo. Al prevenir la anemia, los niños pueden mejorar sus capacidades cognitivas y su interacción con el entorno. En los adolescentes, que requieren más energía, el ácido fólico facilita el desarrollo físico y mental. Tener niveles adecuados de esta vitamina favorece el crecimiento del cuerpo.
- Mantiene el ritmo de vida del adulto: El ácido fólico evita los dolores de cabeza, causados por la anemia, que puede deberse a un trastorno que produce glóbulos rojos más grandes de lo normal. También previene el encanecimiento del cabello, las úlceras bucales o las úlceras pépticas, que generan dolor y baja autoestima. Además, mantiene sana la flora intestinal al evitar las diarreas y favorecer el funcionamiento del aparato digestivo.
- Previene el Alzheimer en los adultos mayores: El ácido fólico mejora la memoria y las funciones cognitivas en las personas de edad avanzada. Estudios de organizaciones estadounidenses indican que han observado una disminución del índice de pérdida de la audición y de la enfermedad de Alzheimer, cuando se consume regularmente ácido fólico.
FUENTES DE ÁCIDO FÓLICO EN LA DIETA
El ácido fólico se puede obtener de dos formas: a través de los alimentos o de los suplementos. Los alimentos que contienen ácido fólico son principalmente de origen vegetal, como las verduras de hoja verde, las legumbres, los cereales integrales, las frutas cítricas y los frutos secos. Sin embargo, el ácido fólico de los alimentos se puede perder por la cocción, el almacenamiento o el procesamiento.
Los suplementos de ácido fólico son una forma de asegurar el consumo adecuado de este nutriente, especialmente en casos de mayor demanda, como el embarazo, la lactancia, la anemia o algunas enfermedades. Los suplementos de ácido fólico se pueden encontrar en forma de pastillas, cápsulas o gotas. La dosis recomendada varía según la edad, el estado de salud y las necesidades de cada persona.
Es importante consultar con el médico antes de tomar suplementos de ácido fólico, ya que un exceso de este nutriente puede causar efectos adversos, como alteraciones gastrointestinales, insomnio, irritabilidad o alergias. También puede enmascarar una deficiencia de vitamina B12, que puede provocar daños neurológicos.
RECOMENDACIONES PARA EL CONSUMO DE ÁCIDO FÓLICO
El consumo de ácido fólico es beneficioso para la salud, pero se debe hacer con moderación y siguiendo algunas recomendaciones, como:
- Seguir una dieta equilibrada y variada, que incluya alimentos ricos en ácido fólico, como las verduras de hoja verde, las legumbres, los cereales integrales, las frutas cítricas y los frutos secos.
- Cocinar los alimentos con poco agua y a fuego lento, para evitar la pérdida de ácido fólico por el calor o la lixiviación.
- Conservar los alimentos en lugares frescos y secos, y consumirlos lo antes posible, para evitar la pérdida de ácido fólico por la oxidación o la degradación.
- Tomar suplementos de ácido fólico solo bajo prescripción médica, y respetar la dosis y la duración indicadas, para evitar el riesgo de toxicidad o de interacciones con otros medicamentos.
- Controlar los niveles de ácido fólico en la sangre, mediante análisis periódicos, para detectar posibles deficiencias o excesos, y ajustar el consumo según las necesidades de cada persona.
¿Y TÚ QUE OPINAS?
¿Qué te ha parecido este artículo sobre el ácido fólico y la salud? ¿Consumes alimentos o suplementos ricos en ácido fólico? ¿Por qué? ¿Qué beneficios del ácido fólico te han llamado más la atención o te parecen más relevantes? ¿Cuáles otras vitaminas o nutrientes consideras esenciales para tu salud? ¿Qué dudas o consultas tienes sobre el ácido fólico o sobre la nutrición en general? Déjanos tus comentarios y comparte tu opinión con nosotros. ¡Te leemos!
Muchas gracias por leerme. Hasta pronto.
Redacción de rdndigital.com
Con información de lostiempos.com
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