Descubre las 3 mejores estrategias científicas para dejar de fumar4 min read

El tabaco mata a más de 8 millones de personas al año, de los cuales 7 millones son fumadores activos y más de un millón son víctimas del humo de segunda mano, conocidos como fumadores pasivos. El impacto del tabaquismo sigue siendo devastador, afectando no solo a quienes lo consumen directamente, sino también a quienes están expuestos involuntariamente al humo.

Científicos han comprobado que los fumadores pierden, al menos, 10 años de vida en comparación con los no fumadores. Esto se debe a que el humo del tabaco contiene más de 69 sustancias químicas que causan cáncer. El cáncer de pulmón es la enfermedad más común entre los fumadores, pero también se han reportado otros tipos de cáncer como el de boca, esófago, estómago y páncreas, entre otros.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 1.250 millones de adultos en el mundo consumen tabaco. A pesar de los avances en el control del consumo de tabaco, el Dr. Ruediger Krech, director del Departamento de Promoción de la Salud de la OMS, advierte que no se debe bajar la guardia en la lucha contra este hábito.

Dejar de fumar puede cambiar radicalmente tu vida. Encarnación Castillo, profesora de enfermería de la Universidad CEU Cardenal Herrera, menciona que en tan solo 24 horas después de dejar de fumar, la nicotina se elimina por completo del cuerpo. Al año, el riesgo de sufrir un infarto disminuye en un 50 %, y después de 10 años, el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón se reduce a la mitad.

Sin embargo, dejar de fumar no es fácil. Las investigaciones científicas han identificado varias estrategias efectivas para abandonar este hábito. Entre ellas, la combinación de fármacos y apoyo conductual se ha demostrado como una de las mejores maneras de superar la adicción al tabaco.

Un reciente estudio del grupo Cochrane de Adicción al Tabaco identificó tres métodos efectivos para dejar de fumar:

• Vareniclina: Un medicamento recetado que se vende bajo las marcas Chantix o Champix, ayuda a reducir los síntomas de abstinencia.

• Citisina: Un compuesto natural que también alivia los síntomas de abstinencia del tabaco.

• Cigarrillos electrónicos: Aunque controvertidos, los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a reducir la dependencia del tabaco tradicional.

Además de estas tres estrategias, el uso de bupropión y la terapia de reemplazo de nicotina (TRN), como los parches y la goma de mascar, han demostrado ser eficaces. Los estudios sugieren que combinar estas terapias con apoyo conductual aumenta significativamente las posibilidades de éxito.

El apoyo psicológico y emocional es clave durante el proceso de dejar de fumar. Contar con un profesional que guíe y acompañe al fumador en su camino hacia la abstinencia puede marcar la diferencia en el resultado final.

Es importante recordar que dejar de fumar no es solo una cuestión física, sino también mental y emocional. Los expertos recomiendan buscar ayuda de un profesional de la salud para recibir apoyo conductual durante el proceso, lo que puede incluir terapia individual o en grupo, motivación y seguimiento.

La lucha contra el tabaco sigue siendo un reto mundial, pero con las herramientas adecuadas y el apoyo necesario, dejar de fumar es posible para cualquiera.

¿Has intentado dejar de fumar antes? ¿Qué métodos has utilizado? ¿Qué opinas sobre el uso de cigarrillos electrónicos como alternativa para dejar de fumar? ¿Conoces a alguien que haya dejado de fumar con éxito? ¿Cómo lo logró? ¿Te has planteado usar la terapia de reemplazo de nicotina? ¿Qué tan efectiva crees que sea? ¿Qué papel crees que juegan el apoyo psicológico y conductual al dejar de fumar? Déjanos tus comentarios y comparte tu experiencia con nosotros. ¡Te leemos!

Muchas gracias por leerme. Hasta pronto.

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