¿Es malo usar el mismo vaso por varios días? Descúbrelo3 min read

Muchas personas tenemos la costumbre de usar el mismo vaso por varios días sin lavarlo, ya sea porque solo lo usamos por las noches o porque preferimos rellenar nuestra botella de agua sin necesidad de limpiarla. Sin embargo, esta práctica puede tener consecuencias negativas para nuestra salud.

Y es que aunque no los veamos, los microorganismos están presentes en el agua y en nuestra saliva. Algunos de ellos son beneficiosos para nuestro organismo, pero otros pueden causarnos enfermedades. Por eso, es importante lavar el vaso cada vez que lo usamos o al menos una vez al día.

Según una investigación de la Universidad Autónoma de México, el agua contiene de forma natural virus, bacterias y protozoarios que contribuyen al reciclaje de nutrientes. Sin embargo, si el agua no está limpia o se contamina con nuestra saliva, puede albergar microorganismos patógenos que pueden afectar nuestra salud.

Si usamos el mismo vaso por varios días sin lavarlo, podemos estar ingiriendo estos microorganismos sin darnos cuenta. Algunas de las enfermedades que pueden provocarnos son:

• Salmonela.
• Legionella.
• Hepatitis A.
• Rotavirus.
• Giardia Lamblia.
• Cryptosporidium parvum.

Estas enfermedades se caracterizan por causar síntomas como diarrea, fiebre, dolor abdominal, náuseas, vómitos y deshidratación. En algunos casos pueden ser graves y requerir atención médica.

Para evitar que el vaso se contamine con bacterias y nos cause enfermedades, lo mejor es lavarlo después de cada uso o al menos una vez al día. Para ello podemos usar agua caliente y jabón o un detergente específico para vajillas. También podemos usar un cepillo o una esponja para frotar bien el interior y el exterior del vaso.

Además, es recomendable secar bien el vaso con un paño limpio o dejarlo boca abajo sobre un papel absorbente. Así evitaremos que quede humedad que pueda favorecer el crecimiento de hongos u otros microorganismos.

También es aconsejable guardar el vaso en un lugar limpio y seco, alejado de fuentes de calor o luz directa. Así evitaremos que se altere la calidad del agua o que se atraigan insectos u otros animales.

Además de lavar el vaso cada vez que lo usamos o al menos una vez al día, también debemos tener otros cuidados con el agua que bebemos. Algunos de ellos son:

• Beber agua potable o purificada, que cumpla con los estándares de calidad y seguridad. Si no estamos seguros del origen o la procedencia del agua, podemos hervirla, filtrarla o desinfectarla con cloro o yodo.
• No dejar el agua mucho tiempo al aire libre o en contacto con el sol, ya que puede alterar su sabor, olor o color. También puede favorecer el crecimiento de algas u otros organismos.
• No rellenar las botellas de agua con agua del grifo o de otra fuente, ya que podemos contaminar el agua nueva con el agua vieja. Lo mejor es usar botellas nuevas o reutilizables que se puedan lavar y desinfectar.
• No compartir el vaso o la botella con otras personas, ya que podemos transmitir o recibir microorganismos a través de la saliva. Lo mejor es usar un vaso o una botella individual y no prestarlo ni pedirlo prestado.

Como ves, usar el mismo vaso por varios días sin lavarlo puede ser malo para tu salud. Por eso, te recomendamos que lo laves cada vez que lo usas o al menos una vez al día. Así evitarás enfermedades y cuidarás tu bienestar.

Y tú, ¿qué opinas sobre usar el mismo vaso por varios días sin lavarlo? ¿Lo haces o no? ¿Conoces otros consejos para mantener el vaso limpio y el agua fresca? Déjanos tus comentarios al final del artículo y comparte este contenido con tus contactos para que ellos también estén al tanto. ¡Gracias por leernos!

Esperamos tus respuestas. ¡Hasta pronto!

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