Seguro que alguna vez te ha pasado que te tiembla el párpado. Estás conversando con alguien o estás en medio de una clase y tu ojo parece tener espasmos. Piensas que la solución está en tocarte los párpados pero después de un rato sigues con el tic ocular y lo único que logras es que se irrite, pero los temblores continúan. La ciencia tiene la respuesta para este fenómeno que siempre surge en el momento menos oportuno y que se llama mioquimia.
La mioquimia es un movimiento involuntario de los músculos del párpado que no se puede controlar. Este tic ocular suele afectar más al párpado inferior y a menudo desaparece sin mayor problema.
CAUSAS DE LOS TEMBLORES OCULARES
Las principales causas que pueden provocar esta contracción del músculo del párpado son el estrés, la fatiga, el tabaco, la falta de sueño o los efectos del consumo de la cafeína y también los del alcohol.
También se relaciona con la sequedad ocular por lo que el uso prolongado de pantallas electrónicas se considera como otra posible causa.
En raras ocasiones, ocurren como efecto secundario de algunos medicamentos usados para tratar las cefaleas o migrañas.
Cuando estas contracciones son más fuertes el párpado puede llegar a cerrarse por completo (blefaroespasmo) y se produce por irritación de:
- Las membranas de los párpados (conjuntiva)
- El ojo (la córnea)
- De forma similar, el blefaroespasmo tiene en otras ocasiones causas desconocidas. Puede durar incluso días y es bastante molesto.
¿CUÁNDO DEBO IR AL MÉDICO SI TENGO UN TIC OCULAR O MIOQUIMIA?
En caso de que se den alguna de estas condiciones sería necesario ir al especialista:
- Cuando las contracciones del párpado duren varias semanas.
- Si estos temblores oculares también suceden durante la noche, cuando se supone que el ojo está más relajado.
- Si la mioquimia afecta a otras partes de la cara.
¿QUÉ PUEDO HACER PARA EVITAR QUE APAREZCAN ESTOS MOVIMIENTOS INVOLUNTARIOS?
Para evitar estas molestas mioquimias se recomiendan una serie de consejos sencillos que conseguirán proteger nuestros ojos para mantenerlos sanos.
La mayoría de los expertos en oftalmología coinciden en recomendar una serie de pautas:
- Los ojos necesitan un descanso adecuado.
- El estrés y cualquier tensión o ansiedad es un factor que puede causar el tic ocular.
- Las sustancias estimulantes como la cafeína, el tabaco y el alcohol impedirán que nuestros ojos permanezcan relajados.
- Hacer un uso responsable de cualquier tipo de pantalla electrónica. La luz azul que proyectan los móviles, tabletas y ordenadores son muy perjudiciales para la salud ocular en general y puede causar tic ocular. Es recomendable un descanso cada hora.
- La sequedad ocular se puede evitar si somos conscientes de lo necesario de nuestros parpadeos.
- Las lentillas solo deben ser usadas en caso de que no sea posible llevar gafas.
- Siempre se debe usar luz indirecta.
CÓMO PREVENIR Y TRATAR EL TIC OCULAR O MIOQUIMIA
El tic ocular o mioquimia es un fenómeno común y benigno que suele desaparecer por sí solo. Sin embargo, si persiste o se agrava puede ser un signo de algún problema ocular o sistémico.
Por eso, es importante prevenirlo y tratarlo adecuadamente siguiendo las recomendaciones anteriores y consultando al médico si es necesario.
Algunos tratamientos que pueden ayudar a aliviar el tic ocular son:
- Masajear suavemente el párpado afectado con los dedos limpios.
- Aplicar compresas frías o calientes sobre el ojo cerrado.
- Usar gotas lubricantes o artificiales para hidratar el ojo.
- Evitar frotarse los ojos con las manos sucias o con objetos que puedan irritarlos.
- Tomar analgésicos o relajantes musculares si el tic ocular es muy doloroso o molesto.
- En casos más graves, se puede recurrir a la inyección de toxina botulínica (botox) para paralizar temporalmente el músculo del párpado. Este tratamiento debe ser realizado por un especialista y tiene efectos secundarios como la caída del párpado, la visión doble o la sequedad ocular.
¿Y TÚ QUE OPINAS?
El tic ocular o mioquimia es un movimiento involuntario de los músculos del párpado que no se puede controlar. Suele ser un fenómeno común y benigno que desaparece por sí solo, pero puede ser un signo de algún problema ocular o sistémico.
Las principales causas que pueden provocar esta contracción del músculo del párpado son el estrés, la fatiga, el tabaco, la falta de sueño o los efectos del consumo de la cafeína y también los del alcohol. También se relaciona con la sequedad ocular por lo que el uso prolongado de pantallas electrónicas se considera como otra posible causa.
Para evitar estas molestas mioquimias se recomiendan una serie de consejos sencillos que conseguirán proteger nuestros ojos para mantenerlos sanos. Además, se pueden aplicar algunos tratamientos para aliviar el tic ocular si persiste o se agrava.
Y tú, ¿qué opinas de este fenómeno? ¿Te ha pasado alguna vez que te tiemble el párpado? ¿Qué haces para evitarlo o tratarlo? Déjanos tu comentario abajo.
¡Gracias por leernos!
Redacción de rdndigital.com
Con información de hospitalochoa.com
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