Fuente: semana.com
La próstata es una glándula del aparato reproductor masculino. Se encuentra debajo de la vejiga y su función es producir el líquido prostático que protege a los espermatozoides y potencia las posibilidades de una fecundación exitosa.
Ahora bien, las patologías prostáticas son de las más temidas entre los hombres adultos, por lo que es importante tener en cuenta que muchas de ellas se pueden prevenir con una dieta adecuada, según el portal Mejor con Salud.
Gerald L. Andriole, médico de Johns Hopkins Medicine, señala que la prostatitis, en concreto, consiste en dolor, hinchazón e inflamación de la próstata, o en todos estos síntomas a la vez. Por lo general, se desconocen las causas de la prostatitis, pero puede ser el resultado de una infección bacteriana que se extiende a la próstata desde las vías urinarias o desde la sangre.
Cabe resaltar que el estilo de vida de un hombre es primordial para que la próstata esté saludable. Además, necesita alimentarse y hacer ejercicio físico de forma rutinaria.
PROBLEMAS DE PRÓSTATA MÁS COMUNES EN HOMBRES
- Prostatitis: inflamación de la próstata provocada generalmente causada por bacterias.
- Hiperplasia prostática benigna (HPB o agrandamiento de la próstata): un problema común en hombres adultos que se produce porque al aumentar el tamaño de la próstata se estrecha la uretra y causa goteo después de orinar o necesidad de orinar con frecuencia, especialmente por la noche.
- Cáncer de próstata: un tumor masculino frecuente que conviene detectar de forma precoz para mejorar el pronóstico.
FRUTAS PARA LA PRÓSTATA
En su mayoría las frutas son los alimentos más saludables, sin embargo, en el caso de la próstata, la sandía, la guayaba y la papaya son ideales para reducir la inflamación, gracias a su alto contenido en vitamina A, C y licopeno, según el magazín Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar.
Otros alimentos:
El pescado azul. Estos productos cuentan en su composición con ácidos grasos de la serie omega-3. Estos lípidos insaturados tienen el mayor potencial para la salud en su capacidad de reducir el riesgo cardiovascular, según una investigación publicada en la revista Circulation. El efecto de los omega-3 sobre el sistema cardiovascular se debe a la capacidad antiinflamatoria de los mismos. Dicha propiedad no se ejerce sólo sobre las arterias y el corazón, sino que se extiende a otros órganos del cuerpo humano, entre ellos, la próstata.
Tomates. El tomate contiene en su composición un poderoso fitonutriente denominado licopeno, que actúa como antioxidante y como antiinflamatorio. Dicho nutriente se relaciona de manera muy estrecha con la reducción del riesgo de desarrollar cáncer de próstata, según una revisión de varios artículos publicada en el año 2015. No solo es eficaz el licopeno para disminuir la incidencia del cáncer de próstata y para desinflamar este órgano.
Brócoli. El contenido en sulforano del brócoli y de otras crucíferas como la col, la coliflor o las coles de bruselas tiene un efecto protector frente al cáncer de próstata, según el portal de salud Cuerpo y Mente.
Frutos secos. Las nueces, en concreto, además de omega-3 son una gran fuente de zinc, un nutriente clave para la salud de la próstata que contribuye a frenar el envejecimiento de la glándula y, en consecuencia, el aumento de su tamaño.
Ajo. Al contener propiedades bacterianas y antinflamatorias, también puede ayudar con el problema de próstata. Lo ideal es consumir un diente de ajo crudo en ayunas, pero para que no quede el mal sabor en la boca, se puede partir un diente en dos y tomarlo como si fueran pastillas, según el diario El Universal en su sección de salud y bienestar.
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